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Querida amiga,

A pesar de hablar con vos todos los días me gusto la idea de volver al “papel y lápiz” , como en nuestros viejos tiempos, para contarte un poco como viene cerrando mi año. Esta charla seria definitivamente una charla que hubieramos tenido con mate o birra de por medio, pero bueno, nuestra diferencia geográfica me lleva a hacerte llegar estas palabras en formato de carta. Me gusta la carta. Me gusta la idea de que las palabras viajen contenidas en un soporte de un lugar al otro y que no se las lleve el viento.

 Yo juro que te estoy escribiendo una carta a mano, aunque los avances tecnológicos de hoy en día me permitan apretar un botón y hacer que la recibas en dos segundos. Pero bueno, ¿Jugamos a que recibís esto en el buzón de tu casa?

( Escribí eso y me tenté. Pensé: ¿Los Tazelaar tienen buzón? Si lo tienen no lo chequean desde el 1999. Como el timbre, que no anda desde que te conozco)

Bueno se termina el 2013. Creo que fue uno de mis mejores años. Si, sin duda lo fue. Empezó en Uruguay con vos. Yo creo que ese viaje y su magia me dio toda la fuerza para transitar y terminar el año de la misma manera que lo empecé. Volví de Uruguay y tuve 6 meses de despedida a Bs As. Meses en los que lo único que hicieron fue mimarme y aprovecharme en mis últimos días. Ellos a mi y yo a ellos, claro. Meses en los que cerré etapas y abrí puertas a nuevos capítulos. Y después empezó este gran viaje, el cual revolucionó todos mis estados, sensaciones, vivencias. Que lindo es viajar! (que poco te falta para que te llegue a vos!) .

Y bueno, aca estoy, terminando de vivir las últimas semanas. Ya te conté cada detalle de estos últimos cuatro meses. Ahora estas dos últimas semanas que me quedan estoy terminando de cerrar “contratos” laborales e inmobiliarios  para empezar un año nuevo en todo sentido. Por suerte ya tengo trabajo y casa asegurados. En cuanto al trabajo, voy a empezar a trabajar para dos familias distintas de babysitter. Son 4 horas por día por lo cual tengo varias horas libres para usarlas como quiera. Además me pagan bárbaro y las madres son unas divinas. Una es fotógrafa y diseñadora. Así que siento que algo de ella voy a aprender. Y me quiere dar un auto! So Cool.  Despúes, si se puede, voy a seguir trabajando en el bar de este Hotel que te conté. Es un Hotel en West End que tiene toda la onda. Es viejo pero esta remodelado, tiene 5 pisos, todo de madera y colores. Muy loco como West End. Y trabajan todos “jóvenes” de diferentes partes del mundo. Es muy divertido. Bueno, que mas? Ah, en mi tiempo libre como siempre seguiré con trabajos freelance de fotografía. Ya tengo dos citas con fotógrafos para conocer el estudio y en el caso de uno, aportar a una revista que edita. También se viene un posible shooting a una modelo para una revista de tattoos. Pero no quiero adelantarme a contarte nada porque no hay nada cerrado aún.  Así que eso, tema trabajo ya esta resuelto. Y estoy super conforme. Logre el balance entre crecer profesional y personalmente y hacer plata. Objetivo cumplido o en vísperas de cumplirse.

Tema casa, la primer semana de enero me mudo a una casa INCREIBLE! Queda a una cuadra de la mía y es soñada. Es gigante, con mucha luz, mucho jardín  y lo que mas me divierte es que tiene un taller! Así que espero empezar a pintar. A ver si puedo seguir con lo que empecé en Buenos Aires aquella vez con “el tigre mujer” ¿Te acordas? Tengo muchas ganas de seguir sacando todo para afuera.

Con el tema de la nueva soledad vengo sobrellevandolo perfecto. Los primeros días fue difícil lidear con la incertidumbre de no tener trabajo, ni casa, ni nadie al lado las 24 hs del día como solía tener. Pero todo se acomodó. A las chicas, mis amigas aussies, las veo varias veces por semana y hacemos esas cosas que hacen las amigas: nos juntamos a comer, a tomar algo, nos pasamos a saludar por los trabajos. Zowie me invito a pasar navidad con su familia en su casa en la playa así que estoy feliz. Me re malcría, esta muy encima todo el tiempo y para ella es un programon tenerme al lado. Me contó que su mama es un personaje así que muero por conocerla. Mañana voy a la City a comprar todos los regalitos de navidad para ser una buena invitada.  A los chicos, no los volví a ver porque están de vacaciones. Alberto se fue a Katmandu un mes por un proyecto, Lucas jamas volvió de Byron, Jack esta girando por Australia con su van y Wayne se fue a Waga Waga, un lugar cerca de Sydney para “concentrarse en su arte” (joyería). Hablando de Jack hoy es su cumpleaños. No se si alguna ves te lo dije pero estoy tan contenta de haberlo conocido. Hace tiempo que tengo como lema rodearme de gente con buena energía, que me haga crecer, que me deje algo. Y Jack es el ejemplo perfecto. Sin etiquetas, como todas mis relaciones, pero con un cariño bien sano. Y yo no soy la única fan de Jack, es de esas personas que se hacen querer con solo sonreír. Por ejemplo, te copio uno de los mensajes que recibió para su cumple que resumió en gran parte lo que produce en los demas: “My dear amazing Jack today you be rewarded with the same generous & uplifting energy you constantly give to this life xx “

Otra cosa linda que me paso con respecto a amigos es que estuve “hangeando” mucho con Wayne. Me hizo acordar a mis días con Nico. Esa especie de mejor amigo que hace creer en la amistad entre el hombre y la mujer. Y te estoy hablando de una amistad genuina. Mas allá de la atracción física o sexual (la cual no me parece importante en estas relaciones), pude comprobar de nuevo la capacidad de formar un vinculo tan profundo con un amigo hombre. Tuve desayunos, tardes y noches de pijama party como las que tenía con Nico. Me encanta. No podría vivir sin un amigo hombre.

Me hice nuevos amigos también! En este caso ambos son vecinos. Por un lado el español que es un divino y tenemos charlas donde nos encontramos reflexionando durante horas. Lógico, somos dos viajeros de habla hispana, edades parecidas, vida parecida. Las similitudes sobran. Mi otro nuevo amigo tiene un nombre raro que no se pronunciar así que  le digo “rasta”. Lo conocí hace unos meses porque trabaja en un liquor shop en West End y habla español. Así que por esas cosas de la vida terminamos hablando. El otro día volvía caminando a casa y escucho que alguien grita “María” (así me dicen aca los que saben hablar español, los que no saben me dicen Mesha y los que son muy amigos me dicen Chula o Mechi….con tantos nombres casi estoy perdiendo la identidad). Era el rasta. Quería huevos. Así que como buena vecina le dije que me acompañara a casa a buscar. Entre una cosa y la otra terminamos tomando una birra y hablando horas. Quedamos en vernos pronto para una degustación de vinos.

Extraño un montón a mi familia. Sobretodo en esta época de cumpleaños y fiestas donde los asados y las juntadas se hacen cotidianos. Y encima que ahora Sol esta en Buenos Aires, los motivos para festejar sobran. El otro día cumplió mi abuela e hicieron una comida en lo de mi tía Betty. Noche de verano, picadita y alcoholes sobre la mesa. Los llame por Skype y me pusieron en el medio de la mesa. Me sentí con ellos un ratito. Apenas corte me largue a llorar. Me deje ser un rato, me mordí los dientes, puse música fuerte y me puse a limpiar la casa. Por suerte se paso rápido. Recién, estaba con Aurie tomando algo en la terraza y lo llamaron desde Francia para hacerlo parte via Skype del cumpleaños de su hermana. Yo me quede ahí con el durante la charla y vivió la misma situación que yo viví el día anterior. Su familia reunida alrededor de la chimenea tomando champagne y comiendo brusquetas antes de sentarse a la mesa. Comentamos lo difíciles que son esas momentos pero al mismo tiempo coincidimos que son fugaces. Al día siguiente te levantas y seguís con tu vida como si nada. Por lo menos por un tiempo. Ahora la cabeza tiene otros objetivos, otras cosas en las que pensar. Así que aunque duela, hay que ser fuertes y seguir con la vida que vinimos a vivir.

Y a vos como te extraño chiquita! Y con estos aires de verano más aún. Yo vengo sintiendo el calorcito hace ya varios meses pero el de Argentina es diferente. ¿Sabes que extraño? Caminata por el río entre las 5pm y 7pm, volver a bañarnos para encontrarnos en una hora para comer papas fritas y tomar una birra. Y después rematar con un helado. Y que te quedes a dormir a casa. Porque somos dos grandulonas de 24 años que seguimos haciendo la de “quedarnos a dormir en lo de una amiga”. ¿Viste que llega una edad que ya no se usa? Todas se ponen viejas y quieren dormir en sus camas, con sus sábanas, con su cepillo de dientes. Nosotras somos fanáticas de la quedada a dormir. Como nos banco. Entre otras cosas que extraño estan: quincho, mate, techo, lagartear al sol, bandita, uruguay. Yo se que vos también me extrañas y sobretodo en verano, pero sabe que todos los días pienso en vos. Y que pronto estaremos juntas para vivir no solo veranos sino las 4 estaciones en quien sabe donde. Pero juntas al fin.

Con todos los cambios vividos recientemente se hizo muy común la pregunta: ¿Y que planes tenes ahora? Mi respuesta es POR AHORA soy feliz en West End y aca quiero estar. Además por un tema monetario no puedo darme el lujo de hacer lo que quiera, asi que tengo que instalarme, trabajar y sobre todo ahorrar. Ahorrar para poder tomar decisiones inteligentes en un futuro. ¿Qué quiero? ¿Tomarme los últimos meses para recorrer Australia en van? ¿ Aplicar para una visa de estudio? ¿ Irme a Asia? No se, no se, no se! Y no tengo porque saberlo ahora. ¿Y cuando volves a Argentina? No se no se no se! ¿Y si nos vamos a Europa? Si! También me quiero ir a Europa. Tengo tantas cosas en las cabeza, tantas ganas de todo. Asi que lo ideal es quedarme a vivir un poco el presente. No estoy hablando de la gilada del “Carpe diem” porque me parece un extremo, pero sino tener la capacidad de plantarnos en el día a día. Disfrutar, respirarlo. Ser conciente del futuro pero no quedarse a vivir en el.

En conclusión, gracias vida por este año divino el cual cierro con moño para empezar uno aún mejor. Salud!

Feliz año nuevo amiga, empieza TU gran año. Disfrútalo desde el primer minuto.

Te amo, te extraño, te abrazo!

POR AHORA ESTOY SOLA

Y después de muchos días sin inspiración y varios de muchos cambios, finalmente me vuelvo a sentar frente a mi cuadernito para escribir lo que estoy sintiendo. Tuve 2 o 3 semanas de días grises que llevaron a tomar decisiones que hicieron que hace exactamente una semana, vuelva a sonreír. Y fueron sonrisas que se repitieron cada día de esta última semana, hasta la noche de hoy que volvió a aparecer la inspiración. Mas que nada creo que decantó. La exposición a tantos estímulos hizo que hoy me dieran ganas de “salir para afuera”. Esas ganas, acompañadas del empuje de lectores preferidos y de las ansias de aquellos del otro lado del mundo de saber si estoy bien, me traen de nuevo acá.

Asi que en primer lugar, estoy bien. Estoy feliz.

Parte de los cambios recientemente vividos es la “pérdida” de mi compañera de viaje por tiempo indefinido. Por diferencia en proyectos de vida y búsquedas personales hoy nos separan varios KM. Ella esta en Sydney y yo estoy en Brisbane. La realidad es que intente mudarme a Sydney, pero por varias razones no funcionó. No estaba en mis planes enamorarme de West End ni en los de ella enamorarse de un argentino. Pero la vida es acerca de decisiones en búsqueda de la propia felicidad. Así que asumo y deseo con fuerza, que las nuestras daran los mejores frutos.

Y con este nuevo panorama llega la hora de la verdad.

¿Qué es realmente vivir SOLA (en la otra punta del mundo)?

 Hay días buenos y malos, como dice mi hermana cuando me llama desde Madrid para darme apoyo. Hay días que lo mejor que te puede pasar es estar sola y hay días en que te enoja no tener a nadie cerca en el momento justo. Sin ir al drama, por ejemplo, el otro día me quería poner un hermoso vestido para salir y no pude lograr subirme el cierre sola. Carl, mi roomate, estaba en su quinto sueño como para venir a ayudarme asi que tuve que pasar al plan B y cambiarme el vestido. Necesitaba que Cali este ahí para ayudarme! Pero bueno, después me convenci de que no era la noche para usar ese vestido y que por eso la vida no quiso que me lo ponga. Es mas fácil pensarlo así antes que enojarme por no tener a Cali al lado. Otra cosa es que llego tarde a todos lados (siendo la mujer mas puntual del mundo) porque me paso horas buscando las llaves. Antes, Cali siempre estaba ahí para ayudarme: “No estaran en el baño?” “Buscaste en tu cartera roja?” Y mágicamente ella siempre las encontraba. Pequeñas anecdotas, pero hacen la diferencia en el día cotidiano.

Otra novedad de la soledad es encontrarme hablando sola varias veces del día. Reflexionando acerca de lo que veo en la calle, inventando historias, haciendome amiga de mi insconciente. Nos venimos llevando barbaro por suerte. Por alguna razon siento que le tengo que contar todas mis vivencias en voz alta. Esta bueno porque me las creo. Porque a veces son tan increibles que me cuesta creerlas. Es como cuando cortas con un amor y todavia no terminas de (o no queres) entender el porqué. Necesitas contarlo en voz alta muchas veces a muchas amigas para terminar de convencerte. ¿Algo asi, no?

Y por supuesto que estan los momentos donde uno “agracede” estar sola. Por ejemplo, esta semana sali a comer con un alumno de español y su esposa cosa que no hubiera pasado si no se hubieran enterado que había vuelto a la ciudad y sola. También tuve un noche increíble con un amigo que me llevo a recorrer bares, comer pizza en la calle y tomar vino en una casa amiga. Otro día, me hice un nuevo amigo español que conocí porque quería alquilar un cuarto en su casa. Vive a 30 metros de mi casa actual y planeo que me enamore de Barcelona para juntar ganas de ir para alla en algún momento. Le gustan los mangos asi que creo que nos vamos a llevar muy bien. Como decía, cosas que no hubieran pasado no estando sola.

¿Y como no volver a sonreir después de volver a reencontrarme con mi único fiel amante, West End? Es un lugar que vive en un dialogo constante conmigo misma. Se la pasa hablando a través de cada uno de sus habitantes. Cada vez que escucho fragmentos de conversaciones, que alguien me habla en la calle, que leo algo escrito en las paredes …puedo sentirle el pulso al lugar. Y eso late adentro mio. Y es ahí donde me voy cuenta que es donde tengo que estar.

En los viajes, pienso, siempre hay que buscar un balance. Y sobretodo, nunca casarse con un plan. Una  amiga viajera me conto en su libro:

 “La idea de repetir un destino me genera contradicciones: por un lado, si es un lugar en el que pase momentos felices, tengo muchas ganas de volver, y a la vez me preguntó si debería hacerlo (al lugar donde has sido feliz no deberías intentar volver, canta Sabina) . Por otro lado pienso, con cierta ansiedad: si tengo tanto mundo por recorrer y tan poco tiempo de vida para hacerlo, porque gastar m

i tiempo en repetir lo que ya vivi? Sin embargo, cada vez que repito un destino descubro rincones nuevos - del lugar y de mi ser - y me doy cuenta que cada re visita tiene sus razones. "

Por ahora decido volver a casa, por ahora decido quedarme aca hasta volver al equilibrio absoluto.

¿Quién dijo que era fácil? Hay que sobrevivir el estrés de no saber si podes pagar una casa a largo plazo, de no tener trabajo y de comer poco y nada. Hay que sobrevivir a trabajos casuales de camarera que te hacen sudar como cerdo 10 horas seguidas subiendo escaleras. Pero cuando sobrevivis y caminas de vuelta a casa respirando la magia del lugar, llegas a tu casa y te tomas una copa de vino con roomates de diferentes partes del mundo….ahi entendes porque estas donde estas y sobretodo, porque no te queres ir jamas.